Los Crímenes de la Calle Morgue y Otros Cuentos de Edgar Allan Poe
Cuando era adolescente no me atraía mucho leer relatos de paranormalismo porque para mí es tan sugestionante como verlo todo digerido en la pantalla. Sí lo admito, soy muy miedosa para esas cosas; pero curiosamente no puedo evitar que de vez en cuando salga mi lado masoquista y termine viendo o leyendo algo que me ponga los cabellos de punta. Como cuando me leí un relato de H. P. Lovecraft en una revista de dibujo. En aquel entonces yo tenía 17 años y estaba loca por aprender a dibujar. En esa edición uno de los colaboradores ilustró con maestría ese pequeño relato valiéndose de figuras extrañas, símbolos antiguos, colores oscuros, efectos borrosos trabajados en Photoshop y un estilo sencillo y al mismo tiempo macabro que dio como resultado un trabajo muy profesional que llevaba hasta el lector una representación visual de los horrores que atiborraban la imaginación del señor Lovecraft. Aquel primer encuentro con el misterio y el horror de un relato de Lovecraft despertó en mí el